\v 9 Luego el cordero abrió el quinto sello, y vi que debajo del altar en el cielo estaban los espíritus de los siervos de Dios quienes otros habían matado porque estos siervos habían creído en el mensaje de Dios y porque le habían dicho a otros acerca de la verdad y sobre Jesús. \v 10 Con alta voz le preguntaron a Dios, "Soberano Dios, Tú eres santo y la verdad. ¿Cuánto tiempo más hasta que condenes y castigues a las personas en la tierra que nos mataron?" \v 11 Luego Dios les dio a cada uno de ellos una larga túnica blanca, y les dijo que descansaran y que tuvieran paciencia por un poco más de tiempo. Ellos debían ser pacientes hasta que las personas malvadas mataran a todos los creyentes que sirvieron a Dios junto a ellos. Estos creyentes fueron quienes Dios quería que murieran de la misma manera en la que estos otros habían muerto.