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Cuando Jesús la vio, Él la llamó para que se acercará a Él. Él le dijo: "¡Mujer, Voy a sanarte de esta enfermedad!" Él colocó sus manos sobre ella. ¡Inmediatamente ella se levantó derecha y comenzó a alabar a Dios! Pero el líder de la sinagoga estaba enojado porque Jesús la había sanado en el día de reposo Judío. Así que le dijo a las personas: "Hay seis días en la semana en los cuales nuestras leyes le permiten a las personas trabajar. Si necesitas ser sano, esos son lo días para llegar a la sinagoga y ser sano." ¡No vengan durante nuestro día de reposo!"