\v 1 Aquello que fue desde el principio, lo que hemos escuchado, lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos contemplado y que nuestras manos han tocado, es acerca de la palabra de vida.
\v 2 También, la vida fue manifestada, y hemos visto, y damos testimonio de ella. Nosotros les anunciamos a ustedes la vida eterna, la cual estuvo con el Padre, y que fue manifestada a nosotros.
\v 3 Aquello que hemos visto y escuchado, le declaramos también a ustedes, a fin de que ustedes puedan tener compañerismo con nosotros. Nuestro compañerismo es con el Padre y con Su Hijo Jesucristo.
\v 4 También les escribimos estas cosas a ustedes para que nuestro gozo sea completo.
\v 4 l que dice: "Conozco a Dios," pero no obedece sus mandamientos, es un mentiroso, y la verdad no está en él.
\v 5 Pero quien siempre guarda Su palabra, ciertamente, es en esa persona que el amor de Dios ha sido perfeccionado. Por esto sabemos que estamos en Él.
\v 6 l que dice que permanece en Dios debe caminar como Jesucristo caminó.
\v 7 Amados, no les estoy escribiendo un mandamiento nuevo, sino un mandamiento antiguo que ustedes han tenido desde el principio. El mandamiento antiguo es la Palabra que ustedes escucharon.
\v 8 Sin embargo, les estoy escribiendo un mandamiento nuevo, que es cierto en Cristo y en ustedes, porque la oscuridad está pasando, y la verdadera luz ya está brillando.
\v 12 Les escribo, estimados hijos, porque sus pecados han sido perdonados por causa de Su nombre.
\v 13 Les escribo a ustedes, padres, porque ustedes conocen a Aquél que es desde el principio. Les escribo a ustedes, jóvenes, porque ustedes han vencido al maligno. Les he escrito a ustedes, niñitos, porque ustedes conocen al Padre.
\v 14 Les he escrito a ustedes, padres, porque conocen a Aquél que es desde el principio. Les he escrito a ustedes, jóvenes, porque son fuertes, y la Palabra de Dios permanece en ustedes, y porque han vencido al maligno.
\v 18 Niñitos, ésta es la última hora. Así como han escuchado que viene el anticristo, ahora muchos anticristos han venido. Por esto sabemos que es la última hora.
\v 19 Salieron de nosotros, pero no eran de nosotros. Porque si hubieran sido de nosotros, habrían permanecido con nosotros. Pero cuando salieron, eso mostró que ellos no son de nosotros.
\v 24 n cuanto a ustedes, permitan que lo que escucharon desde el principio permanezca en ustedes. Si lo que ustedes escucharon desde el principio permanece en ustedes, permanecerán en el Hijo y en el Padre.
\v 25 Y esta es la promesa que Él nos dio: la vida eterna.
\v 27 Y en cuanto a ustedes, la unción que recibieron de Él permanece en ustedes, y no necesitan que nadie les enseñe. Pero así como su unción les enseña acerca de todas las cosas y es verdad y no es mentira, y así como les ha enseñado, permanezcan en Él.
\v 28 Y ahora, amados hijos, permanezcan en Él, para que cuando Él aparezca, podamos nosotros mostrar osadía y no vergüenza ante Él en Su venida.
\v 29 Si ustedes saben que Él es justo, saben que todo el que hace lo que es justo es nacido de Él.
\v 1 Miren qué clase de amor el Padre nos ha dado a nosotros, que podemos ser llamados hijos de Dios, y esto es lo que somos. Por esta razón, el mundo no nos conoce, porque no lo conocen a Él.
\v 2 Amados, ahora nosotros somos hijos de Dios, y aún no ha sido revelado lo que seremos. Sabemos que cuando Cristo aparezca, seremos como Él, pues Le veremos a Él tal cual es.
\v 3 todo aquel que tiene esta confianza en el futuro fijada en Él se purifica a sí mismo, así como Él es puro.
\v 7 Apreciados hijos, no permitan que nadie los extravíe. El que hace justicia es justo, así como Cristo es justo.
\v 8 l que peca es del diablo, porque el diablo ha pecado desde el principio. Por esta razón el Hijo de Dios fue revelado, a fin de poder destruir las obras del diablo.
\v 9 Quien haya nacido de Dios no peca porque la semilla de Dios permanece en él. Él no puede seguir pecando porque ha nacido de Dios.
\v 10 n esto los hijos de Dios y los hijos del diablo se dan a conocer. Quien no haga lo que es justo no es de Dios, tampoco lo es quien que no ame a su hermano.
\v 16 Por esto conocemos el amor, porque Cristo dio Su vida por nosotros. Nosotros también debemos dar nuestra vida por los hermanos.
\v 17 Pero quien tenga los bienes del mundo, viendo a su hermano en necesidad y cierra su corazón de compasión hacia él, ¿cómo permanece el amor de Dios en él?
\v 23 Y este es Su mandamiento --que debemos creer en el nombre de Su Hijo Jesucristo y que nos amemos unos a otros-- así como Él nos dio este mandamiento.
\v 24 l que guarda los mandamientos de Dios permanece en Él, y Dios permanece en él. Por esto sabemos que Él permanece en nosotros, por el Espíritu que Él nos dio.
\v 1 Amados, no crean a todo espíritu, sino prueben los espíritus para ver si provienen de Dios, porque muchos falsos profetas han salido al mundo.
\v 2 n esto ustedes conocerán el Espíritu de Dios -- todo espíritu que reconoce que Jesucristo ha venido en la carne es de Dios,
\v 3 todo espíritu que no reconoce a Jesús no es de Dios. Este es el espíritu del anticristo, que ustedes han escuchado que viene, y que ya está en el mundo.
\v 4 Ustedes son de Dios, amados hijos, y los han vencido, porque Aquél que está en ustedes es mayor que aquél que está en el mundo.
\v 5 Ellos son del mundo, por lo tanto, lo que ellos dicen es del mundo y el mundo los escucha.
\v 6 Nosotros somos de Dios. Quien conoce a Dios nos escucha. Quien no es de Dios no nos escucha. En esto conocemos el espíritu de verdad y el espíritu de error.
\v 9 En esto el amor de Dios fue revelado entre nosotros, en que Dios ha enviado a Su Hijo Unigénito al mundo para que podamos vivir por causa de Él.
\v 10 n esto consiste el amor, no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que Él nos amó a nosotros y envió a Su Hijo como propiciación por nuestros pecados.
\v 15 Cualquiera que reconozca que Jesús es el Hijo de Dios, Dios permanece en él, y él en Dios.
\v 16 También sabemos y hemos creído el amor que Dios nos tiene. Dios es amor, y todo el que permanece en este amor, permanece en Dios, y Dios permanece en él.
\v 17 Por esto, este amor se ha perfeccionado entre nosotros, para que podamos tener confianza en el día del juicio, porque así como Él es, así somos nosotros en el mundo.
\v 18 No hay temor en el amor. Sino que el amor perfecto echa fuera el temor, porque el temor tiene que ver con el castigo. Pero el que teme no ha sido perfeccionado en el amor.
\v 19 Nosotros amamos, porque Dios nos amó primero.
\v 20 i alguien dice: "Amo a Dios," pero odia a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su hermano, a quien ha visto, no puede amar a Dios, a Quien no ha visto.
\v 21 Así que este es el mandamiento que tenemos de Él: el que ama a Dios tiene también que amar a su hermano.
\v 9 Si recibimos el testimonio de los hombres, el testimonio de Dios es mayor. Pues el testimonio de Dios es éste, que ha dado testimonio acerca de Su Hijo.
\v 10 Todo aquel que cree en el Hijo de Dios tiene el testimonio en sí mismo. Todo aquel que no cree a Dios Lo ha hecho mentiroso, porque no ha creído el testimonio que Dios ha dado acerca de Su Hijo.
\v 16 Si alguien ve a su hermano cometer un pecado que no resulta en muerte, debe orar, y Dios le dará vida me refiero a aquellos que pecan, pero no de muerte. Hay un pecado que resulta en muerte, no digo que él deba orar sobre eso.
\v 17 Toda injusticia es pecado; pero hay un pecado que no es de muerte.
\v 18 Sabemos que cualquiera que es nacido de Dios no peca; pero la persona que ha nacido de Dios, Dios la guarda del mal, y el maligno no puede lastimarlo.
\v 19 Sabemos que somos de Dios, y que el mundo entero yace bajo el control del maligno.
\v 20 Pero sabemos que el Hijo de Dios ha venido y nos ha brindado entendimiento, para que podamos conocer a quien es verdadero. También estamos en Él aquel que es verdadero, en su Hijo Jesucristo. Él es el verdadero Dios y la vida eterna.